Hernia en la espalda: Causas y tratamientos

Hernia en la espalda: Causas y tratamientos

 

Las hernias en la espalda provocan dolores, cansancio y desgaste en las articulaciones. Saber identificarlas y tratarlas es fundamental para combatir el dolor. Es uno de los problemas de espalda más escuchados, pero a la vez también muy rodeado de información incorrecta o no muy exacta. Por eso, para que dispongas de la información correcta, en este artículo te explicaremos todo sobre sus causas y sus tratamientos.

 

¿Qué es una hernia discal?

Es una enfermedad en la que parte del disco intervertebral se desplaza hacia la raíz nerviosa, la presiona y produce el dolor de espalda. Es una patología degenerativa de la columna vertebral. En la mayoría de los casos siempre se ha asociado al envejecimiento de la persona. Pero no siempre es así. En algunas ocasiones puede hacer su aparición entre los 35 y los 55 años.

Las causas suelen estar relacionadas con el “trabajo” que le hayas dado a tu espalda. Como, por ejemplo, la sobrecarga y esfuerzo físico.

La columna vertebral está compuesta por vértebras que van desde la zona cervical hasta la zona lumbar. Entre cada una de las vértebras se ubican una especie de almohadillas denominadas discos.

Estos discos están formados por un anillo fibroso y su núcleo pulposo. Cuando el anillo fibroso se rompe o fracciona, el contenido del núcleo pulposo se sale. La salida de ese tejido es lo que se conoce como hernia discal (herniación del núcleo piloso).

A continuación, te explicaremos más detenidamente las causas de que se produzca una hernia discal.

 

Causas de la hernia en la espalda

Hernia de espalda

 

No todo el dolor de espalda es por culpa de una hernia ni todas las hernias duelen. Relacionamos los dolores de espalda con hernias y en muchas ocasiones es un error. Con la edad los huesos se van debilitando, perdiendo elasticidad y flexibilidad, generando un desgaste. Pero este es sólo un factor que causa la hernia discal.

 

Otras causas

–       Sufrir obesidad o sobrepeso.

–       Sufrir una caída o un golpe fuerte.

–       Cargar peso inadecuadamente.

–       Realizar actividades repetitivas que fuerzan la columna.

–       El sedentarismo.

–       Estar sentado o de pie durante un tiempo muy prolongado.

–       Posturas incorrectas a la hora de sentarse.

 

Prevención

Si sufres sobrepeso u obesidad es recomendable controlar la alimentación y realizar deporte con frecuencia. Es una manera de fortalecer los músculos que ayudan a sostener la columna. También es una manera de aumentar la flexibilidad de la columna y de las piernas.

Algo muy importante es evitar levantar objetos pesados en exceso y hacerlo de forma correcta (con la espalda recta y flexionando las piernas).

 

Tratamiento de la hernia discal

En la mayoría de los casos se produce la recuperación casi inmediata y en otros casos se requiere tomar medicación o inyectar inyecciones. Las inyecciones en la zona de la hernia en la espalda pueden ayudar a controlar el dolor durante algunos meses.

Suele administrarse corticoides (antiinflamatorios no esteroides) para controlar el dolor muscular y en algunas ocasiones relajantes musculares.

Como última opción es recurrir a la cirugía. Se opera principalmente para aliviar la presión sobre la raíz nerviosa. Esto permite que el nervio se recupere de manera más eficaz.

Hacer ejercicios de espalda puede aliviar los dolores momentáneamente. Si crees que padeces esta enfermedad acude a un especialista.

Además, puedes seguir utilizando productos naturales que te ayudarán a reducir el dolor y a proteger tu espalda como la Gama Cannabiben , ya que produce una sensación de bienestar y calma en la zona dolorida.

 

Revisado por: Ana Mª Calero Ubieta, Farmacéutica Col. 21022